Información hecha por el Padre Fray Antonio de Porras. Panay, 1624

Información hecha por el Padre Fray Antonio de Porras
comisario del santo oficio prior del Convento
de Panay juez provisor y vicario
del dicho pueblo y rio de él sobre un pescado llamado
Poyo que teniéndolo atravesado
en el gaznate un indio por nombre Luis Alangan.
Se la sacó él mismo habiéndole puesto
en la garganta un[ panesito] de San
Nicolas de Tolentino

En el pueblo de Panay en primero día del mes de
febrero de mil y seiscientos y veinte y cuatro
años el Padre Predicador Fray Antonio de Porras
comisario del santo oficio y prior del convento
de este dicho pueblo, juez provisor y vicario de él y de este
rio de Panay = Dijo que como es público y notorio
ayer miércoles que se contaron treinta y uno del
mes de enero próximo pasado estando Luis Alangan
indio natural de este dicho pueblo pescando
en una laguna pequeña en términos de [Cariotan]
que está cerca de este pueblo de Panay y habiendo cogido
un pescado muy escamoso y espinoso que los bisayas
llaman Puyo y los tagalos loalo los revolvió
el susodicho en un canto de la [epinina] que llevaba
puesta y acudiendo con él a la boca para troncar
la cabeza al dicho pescado y matarlo como lo tienen
de costumbre los indios pescadores y teniéndolo
entre los dientes rompió el dicho pescado la
dicha [epinina] por la parte y lugar donde estaba puesto
y oprimido y se le entró por el gaznate de forma
que aunque hizo fuerza el dicho Luis Alangan
para tragarlo o segarlo fuera no pudo ni le fue
posible quedándosele atravesado y arraigado
el dicho pescado en el gaznate de tal manera
que apenas podía respirar el dicho indio, él
cuál se iba ahogando sin que ningún remedio
bastase a podérselo sacar echando cantidad
de sangre por la boca y narices el dicho Luis Alangan
y así visto que se moría acudieron a llamar
a toda prisa al dicho padre juez y vicario para que
le confesase y habiéndolo hecho por señas el
Luis Alangan a causa de que no podría hablar
y viendo que ya no bastaban humanas diligencias

ni remedios acudió al divino el dicho padre juez
y vicario y le puso al susodicho en el pescuezo a
la parte de la garganta donde tenía el dicho pescado
atravesado un [panecico] del bienaventurado San
Nicolas de Tolentino al cual le dijo se encomendase
muy de veras y pidiese le ayudase en aquel
trabajo ofreciéndole algunas misas y haciéndolo
con mucha devoción al cabo de dos oras que se
puso el dicho [panesico] metiendo el mismo Luis Alangan
sus dedos en la boca asió al dicho pescado
y lo sacó fuera sin ningún trabajo y sin haber hecho
para ello otra ninguna diligencia y así el haberlo
sacado el dicho Luis Alangan con tanta facilidad
no pudo ser con su fuerza y virtud ordinaria sino
miraculosamente y por intercesión y méritos
del bienaventurado San Nicolas de Tolentino
y de su bendito pan a quien generalmente todas
las personas que han sabido y visto el caso lo han
atribuido por parecerles casi con evidencia que si no
era usando nuestro señor de este favor divino con el dicho Luis
Alangan no podía dejar de morir y para que conste
de la verdad y sea notorio el dicho caso para
mayor honra y gloria de Dios nuestro señor y de su glorioso
santo el dicho padre juez y vicario mandó se haga
información sobre todo lo dicho y que los testigos que de ello
supieren sean examinados por el tenor de este
auto para qué fecha la dicha información se pueda
ocurrir con ella a quien convenga y así lo proveyó,
mandó y firmó.
Fray Antonio de Porras
Ante mi
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Marcos Hernandez tonelero de edad de 25 años}
En el pueblo de Panay en primero día del mes de
febrero de mil y seiscientos y veinte y cuatro años
el Padre Fray Antonio de Porras comisario del santo
oficio juez provisor y vicario de este dicho pueblo y rio
de él para la dicha información hizo parecer ante
sí a Marcos Hernandez tonelero estante en este
dicho pueblo del cual fue recibido juramento por Dios nuestro señor
y una señal de la cruz en forma de derecho y habiéndolo
hecho cumplidamente prometió decir verdad en todo
lo que supiere y le fuere preguntado y siéndolo al tenor
del auto de atrás: Dijo que lo que sabe y [pasa es] que ayer miércoles
que se contaron treinta y uno del mes de enero
como a las once del día yendo este testigo así al camarín
donde se está haciendo un sampán que está
al remate del parían de los sangleyes en este dicho
pueblo encontró este testigo en la calle de él con un
indio llamado Juan Bayayo esclavo de Luis Alangan
natural de este dicho pueblo al cual viéndole y corriéndole
preguntó este testigo que adonde iba y el susodicho
le respondió que iba en busca de su ama porque se estaba
muriendo el dicho Luis Alangan su amo a causa
de un pescado que se le había atravesado en el gaznate
y luego al punto este testigo fue a una casa de este
dicho pueblo donde estaba el dicho Luis Alangan al cual
halló casi muerto sin poder hablar echando sangre
por las narices y la boca y preguntándole que era lo
que había sucedido le respondió por señas de modo
que lo entendió buen este testigo que estando pescando cogió
un pescado y revolviéndolo en su [epinina] lo
lo había metido en la boca para le troncar la cabeza
ya este tiempo saliéndose el dicho pescado y rompido
la dicha [epinina] por la parte donde estaba revuelto
se le había entrado por la boca y atravesadosele
en él gaznate y viéndole de este modo este testigo
movido de compasión se dispuso a quererle sacar

el dicho pescado para lo cual metió un dedo de su
mano en el gaznate del susodicho y atentado el dicho
pescado que no podía ir para dentro ni para fuera
y que estaba muy arraigado no le atrevió este testigo
a sacarlo y a este tiempo fue a la dicha casa el
dicho padre juez y vicario y habiendo confesado se
con él el dicho Luis Alangan por señas respeto
de que no podía hablar según dicho tiene [le ató] al
susodicho el dicho padre vicario un [panesito] del
bienaventurado San Nicolas de Tolentino en la
garganta y le dijo que se encomendase muy de
verás al santo y tuviese confianza de que le había
de librar del aquel trabajo y que habiendo pasado
esto en presencia de este testigo se salió el dicho padre
vicario de la dicha casa y juntamente este testigo dejando
al dicho Luis Alangan como cosa muerta
y con el dicho [panesito] en su cuello y después
de pasado lo dicho el mismo día como a las tres
de la tarde se publicó en este dicho pueblo que
el dicho Luis Alangan sin trabajo ninguno metiendo
los dedos en su boca había sacado
fuera el dicho pescado y esto mismo oyó decir
este testigo al dicho padre juez y vicario en
frente de la casa y morada de la Capitán Andrés
Fernández de Puebla justicia mayor y cabo de
la guerra de este río y en mano propia del
dicho padre vicario [vido] este testigo con otros
españoles que estaban presentes un pescado
muy escamoso y espinoso que dijeron llamarse
Poyo y que este nombre le daban los bisayas
y el dicho padre vicario dijo a los [circunstantes]

que aquel pescado era el mismo
que había tenido el dicho Luis Alangan atravesado
en su gaznate que tenía más de dos
dedos de ancho y cinco dedos de largo
poco más o menos de que habiéndolo visto
este testigo quedó admirado y todos los
presentes y lo atribuyeron y este testigo
lo atribuye a milagro que Dios nuestro señor
hizo por intercesión y méritos del bienaventurado
San Nicolas de Tolentino
y de su bendito [panesito] y que esto es lo que
sabe y dijo ser la verdad para el juramento
que tiene fecho en que se afirmó y
[ratificó] y que es de edad del veinte y cinco
años y no le tocan las generales y lo firmó de su nombre
con el dicho padre juez y vicario.
Fray Antonio de Porras Marcos Hernández
Ante mi
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Cristóbal Petites de 34 años}
Y luego incontinente en este dicho día mes y año el dicho
Padre Fray Antonio de Porras juez provisor y vicario para la
dicha información hizo parecer ante sí a Cristóbal Petites
español estante en este dicho pueblo de él que fue recibido juramento
por Dios nuestro señor y una señal de la cruz en forma
de derecho y habiéndolo hecho bien y cumplidamente prometió
de decir verdad y siendo preguntado por el tenor del dicho
auto = dijo que lo que sabe este testigo que el miércoles de
la semana pasada que se contaron treinta y uno del mes
de enero fue muy público y notorio en este dicho pueblo que habiendo
cogido un pescado Luis Alangan natural de él en términos
de [Cariotan] lo metió en la boca revuelto a [euchinina] para
troncarle la cabeza y matarlo según lo acostumbran
haber los pescadores y que a este tiempo por rompiendo el dicho
pescado por la parte y lugar donde estaba se le entró en
el gaznate al dicho Luis Alangan donde se quedó atravesado
sin que el susodicho pudiese por mucha fuerza que hizo tragarlo
ni sacarlo fuera a cuya causa se estaba ahogando
y echando mucha sangre por la boca y narices y que
el dicho padre juez provisor viendo que se moría le
confesó por señas porque de ninguna manera podía
hablar y que así mismo le había puesto y atado
a la garganta un [panesito] del bienaventurado San
Nicolás a quien amonestó y le dijo se encomendase
el dicho Luis Alagan con muy gran confianza de que
había de quedar libre por la intercesión del santo
y como esto se divulgase tanto en esto dicho pueblo este testigo fue
a casa del dicho Luis Alagan a las dos de la tarde poco
más o menos al cual halló echado y cercado de mucha
gente y con muy grandes angustias y congojas sin
poder hablar en ninguna manera y que a penas podía
respirar y como se le preguntase por uno de los que
allí estaban del modo que le había sucedido la desgracia
hizo algunas señas por donde vino a entender este
testigo tenía dentro del gaznate el dicho pescado no reparando
como no reparó este testigo si tenía entonces
el dicho Luis Alangan en su pescuezo el dicho [panecito] de
San Nicolas y que después de esto el mismo día como
a las tres de la tarde estando este testigo en compañía

de otros españoles en la casa y morada del Capitán Andrés [Hernández]
de Puebla justicia mayor y cabo de la guerra de este dicho pueblo oyó
hablar al dicho padre juez y vicario [que venía] diciendo
por la calle que por intercesión de San Nicolas estaba
libre del pescado el dicho Luis Alangan. Y bajando a la calle
este testigo y los demás españoles que allí se hallaron, vieron
en manos propias del dicho padre juez y vicario el
dicho pescado el cual era escamoso y con muchas espinas por
el cerro y lomo y tendría de largo cinco dedos poco más
o menos y de ancho más de dos dedos y oyó decir que le
llamaban los bisayas Poyo y al mismo padre juez
vicario oyó este testigo que el dicho pescado era el que había tenido
atravesado en el gaznate el dicho Luis Alangan el cual metiendo
sus dedos dentro lo había sacado afuera sin trabajo ninguno
cosa de que se quedó este testigo admirado y lo atribuyó
él y los demás a milagro que nuestro [señor] hizo por ruegos
y méritos de San Nicolás y de [ese] bendito pan y así lo entiende
este testigo y no lo atribuye a otra cosa. Y esto es lo que sabe
y es la verdad para el juramento que tiene fecho en que
se afirmó y [ratificó] y dijo ser de edad de treinta y cuatro
años y que no le tocan las generales y lo firmó de su nombre
con el dicho padre juez y vicario.
Fray Antonio de Porras Cristóbal Petite
Ante mí
Juan Bautista R.es
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Don Carlos Mayrug principal de Panay demás de 60 años }
En este dicho día mes y año el dicho padre juez provisor
para la dicha información hizo parecer ante sí a Don Carlos
Mayrug natural y principal de este dicho pueblo ladino
en la lengua castellana e intérprete del juzgado de el
justicia mayor de este dicho pueblo del cual fue recibido juramento
por Dios nuestro señor y una señal de la cruz en forma
de derecho. Y habiéndolo hecho, prometió decir verdad
y siendo preguntado por el tenor del dicho auto: Dijo
que lo que sabe es que el miércoles de la semana pasada
[que] se contaron treinta y uno del mes de enero estando
este testigo comiendo como a hora de mediodía en su casa
en esta dicho pueblo oyó que iban diciendo por la calle
que se estaba muriendo Luis Alangan porque se le había
entrado y atravesado en el gaznate un pescado llamado
Poyo y acabado [que hubo] de comer este testigo fue luego
a casa del dicho Alangan al cual[vido] [que] se estaba ahogando
y no podía hablar echando sangre por las
narices y por la boca y algunos naturales [que] estaban
con él le dijeron a este testigo que tenía atravesado en
el gaznate el dicho pescado y [vido] [que] el dicho Luis Alangan
hacía fuerza para tragar el dicho pescado y por
sacarlo fuera y nunca pudo. Y este testigo le dejó de este
modo y volviendo después a ver al susodicho a las tres
de la tarde el mismo día [le vido] con las mismas ansias
que [labes] primera y de en cuando en cuando se hincaba
de rodillas el dicho Luis Alangan y con las manos
puestas y juntas las levantaba en alto de que daba
muestras rogar a nuestro señor le librase de aquel trabajo
y aflicción en que estaba y le [vido] así mismo[ colgado]
al cuello un [panesito] de San Nicolás y este
testigo lo estaba animando y diciendo se encomendase
muy de veras a nuestro señor Dios y él lo hacía con
mucho fervor y devoción y a este tiempo le dijo este
testigo que probase a sacar el dicho pescado y animándose
el dicho Luis Alangan lo mejor que pudo [acoreto] el mismo
con sus dedos el gaznate y teniendo abierta
la boca acudió este testigo a ver si podía divisar el dicho

pescado y [vido] que se le parecía solamente la cola y este testigo
volvió a decir que procurase sacarlo y a dos veces que el dicho
Luis Alangan metió los dedos de su mano asió al dicho
pescado y lo sacó fuera sin trabajo ninguna saliéndole
a este tiempo sangré de la boca y narices y poniéndose
a ver este testigo el dicho pescado [vido] que era Poyo y que de
su natural es muy escamoso y tiene muchas espinas por el
cerro y espinoso y tendría a su parecer cuatro dedos
de largo y tres de ancho de lo cual quedó admirado este testigo
porque a dos personas [que] estuvieron los años atrás
con otros pescados atravesados en los gaznates la una
natural de [calalaan] no pudieron vivir y
murieron con los pescados semejantes al que tuvo el
dicho Luis Alangan sin poderlos despedir ni sacarse
los dedos gaznates por muchas diligencias que hicieron
con las tales personas según que lo ha oído decir este
testigo a muchos naturales y así por esto presume y entiende
este testigo que nuestro señor por méritos y ruegos de San Nicolás
de Tolentino obró milagro en el dicho Luis Alangan
en que con tanta facilidad sacase con sus mismos dedos
el dicho pescado de dentro de su gaznate y que esto es lo que
sabe y es la verdad para el juramento que hizo en que
se afirmó y ratificó y dijo ser de edad de más de sesenta
años y que no le tocan las generales y lo firmó de su
nombre a su usanza con el dicho juez y vicario entrerrenglones
día [vala].
Fray Antonio de Porras
[Ka Lo Ma Yo Ru]
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Pedro de Arsega tagalo [natural] de San Palo de 17 años}
En este dicho día mes y años el dicho padre juez y
vicario para la dicha información hizo parecer ante sí
a Pedro de Arsega indio tagalo natural del
pueblo de San Palo en Manila y residente en este dicho
pueblo ladino en la lengua castellana del cual
fue recibido juramento y él lo hizo por Dios nuestro señor
y una señal de la cruz en forma de derecho y prometió
decir verdad en todo lo que supiere y le fuere preguntado
y siéndolo al tenor del dicho auto: Dijo
[que] lo que sabe este testigo que el miércoles de la semana
pasada que se contaron treinta y uno del
mes de enero se divulgó en este dicho pueblo que Luis
Alangan natural de él se estaba muriendo a causa
de un pescado llamado Poyo que se le había atravesado
en el gaznate yéndole a troncar la cabeza
y como esto lo oyese decir este testigo a muchas personas [que]
certificarse de él lo que a la casa del dicho Alangan al
cuál le dio compasión deberlo y la tenían del todos
los que [le vean] estar como en [efecto] estaba con muy
grandes congojas sin poder hablar y ahogándose
haciendo señas que tenía atravesando en el gaznate
el dicho pescado lo cual pasó como a las tres de la tarde
el dicho día y a este tiempo este testigo hizo diligencia por sacar
del dicho pescado y metiéndole los dedos para el dicho [efecto]
en la boca del dicho Luis Alangan y que sentía dolor en ello
el susodicho no consintió que prosiguiese en ello más antes
con aquellas ansias en que estaba le mordió enlos
dedos de este testigo el cual no reparo si tenía entonces puesto
al pescuezo algún [panesito] de San Nicolás por
la mucha grita y confusión [que] había en la dicha casa
de la gente que tenían cercado al dicho Luis Alangan
a quien animándole este testigo y diciéndole se encomendase
a nuestro señor le [vido] que se levantó en pies y procuró
vomitar el dicho pescado y con la fuerza que hizo le
salió sangre por la boca y luego metió los dedos en su
boca y sacó el dicho pescado fuera en [presencia] de este testigo

y de otros muchos indios que se quedaron admirados viendo
el dicho pescado porque de largo tendría cuatro dedos de
largo y dos de ancho, poco más o menos, y todo escamoso y espinoso
por el lomo que según esto y haber después oído
[que] el dicho padre juez y vicario le había puesto al pescuezo
un panesito de San Nicolás y que el dicho Luis Alangan
se había encomendado al santo presume y tiene por cierto
este testigo le ayudó en tan gran tribulación y aprieto en
[que] estaba y obró por su ruego milagro en el susodicho
y que esto es lo que sabe y no otra cosa. Y dijo ser
la verdad para el juramento que tiene fecho en que
se afirmó y [ratificó] y dijo ser de edad de diez y siete
años y que no le tocan las generales y lo firmó de su nombre
con el dicho padre juez y vicario.
Fray Antonio de Porras
[Pedro de Arcega]
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Geronimo Assa Tagalo natural de Manila de 37 años}
En el pueblo de Panay en siete días del mes
de febrero de mil y seiscientos y veinte y cuatro años
el Padre Fray Antonio de Porras juez provisor y vicario
de este dicho pueblo para la dicha información hizo parecer
ante sí a Gerónimo Asa indio tagalo natural
de Manila y residente en este dicho pueblo que por ser
ladino en la lengua castellana no fue necesario intérprete
del cual fue recibido juramento y habiéndolo
hecho por Dios nuestro señor y una señal de cruz
en forma de derecho prometió de decir verdad y siendo
preguntado por el tenor del dicho auto de atrás
dijo = (sic) este testigo que el miércoles de la semana
pasada que se contaron treinta y uno del mes de enero
como a las tres de la tarde poco más o menos
estando este testigo en casa de Agustín Paran alguacil mayor
de este dicho pueblo oyó decir a algunas personas
que se estaba muriendo Luis Alangan a causa
de que tenía atravesado un pescado en el
gaznate y este testigo fue luego a la casa del dicho Luis
Alangan al cual halló que se estaba ahogando y
echando sangre por la boca y no podrá
hablar y este testigo movido de lástima se
llegó [a él] y haciéndole abrir la boca por
tres veces metió dos dedos de su mano derecha
en el gaznate del dicho Luis Alangan para
sacarle el dicho pescado y aunque todas tres
veces topó con la cola de él no pudo asirlo
para echarlo fuera y después de esto en presencia
de este testigo le dio un bebedizo Manuel
Tigo sangley christiano diciendo que
con él se había de deshacer el dicho pescado
y salir del lugar donde estaba todo desechó

y aunque estuvo el dicho sangley cirujano
un buen rato aguardando a ver si hacía alguna
operación el dicho bebedizo no fue
bastante para que el dicho pescado saliese
del lugar donde estaba atravesado por
que este testigo metiendo otra vez sus dedos delante
del dicho sangley dentro del gaznate
del dicho Luis Alangan topó y atentó la misma
cola del dicho pescado y al cabo de
media hora que pasó lo dicho se fue este
testigo a su casa y volvió después a ver al dicho
Luis Alangan. Al cual vido de la misma forma
y manera que antes estaba y le vido puesto
al cuello un panesito de San Nicolás y no deteniéndose
mucho se volvió a bajar de la
dicha casa. Y después de esto habiendo pasado como
cosa de una hora, oyó este testigo decir al dicho
Manuel Tigo y a otras personas que el dicho Luis
Alangan estaba libre del dicho pescado y
se había salido por la boca del susodicho
y no oyó otra razón ni más declaración de que
como dicho tiene se había salido el dicho pescado
el cual vido este testigo en manos del dicho
padre juez y vicario en la iglesia de este
dicho pueblo día de la purificación de nuestra señor y lo
dio el dicho por a una india beata de este dicho
pueblo para que lo mostrase a las demás por
que era el que había tenido el dicho Luis Alangan
atravesado en su gaznate. El cual
dicho pescado estaba ya seco y enjuto
y a su parecer de este testigo tendría cuatro
dedos de largo y de ancho tres dedos poco
más o menos y sabe que los visayas

lo llaman Poyo a este pescado y el tagalo
[Loalo] y ha oído decir este testigo a muchas personas
así en Manila como en este dicho pueblo que algunas
personas se han muerto por causa de este
dicho pescado y haberseles [a las tales] atravesado
en los gaznates como le sucedió al
dicho Luis Alangan al tiempo que lo pescó y que
según las razones que tiene dichas este testigo presume
y entiende que Dios nuestro señor libró al dicho
Luis Alangan de la muerte por intercesión
del bienaventurado San Nicolás de Tolentino
y lo atribuye a milagro como lo
han atribuido todas las personas que saben
del caso y que esto es lo que sabe. Y dijo ser
la verdad para el juramento que tiene fecho en
que se afirmó y [ratificó] y dijo ser de treinta
y siete años y que no le tocan las generales y lo
firmó de su nombre a su usanza con el dicho padre
juez y vicario.
Fray Antonio de Porras
[Se Ro Ri Mo Ha Sa]
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Testigo Agustín Parahan natural de Panay de 36 años}
Y luego incontinente en este dicho día mes y año susodicho
el dicho padre juez y vicario para la dicha información hizo parecer
ante sí a Agustín Parahan alguacil mayor de este dicho pueblo indio
natural de el, ladino en la lengua castellana del
cuál fue recibido juramento por Dios nuestro señor y la señal de la
cruz. Y habiéndolo fecho prometió de decir verdad y
siendo preguntado por el tenor del auto que está por cabeza
de esta información: Dijo que lo que sabe es que el miércoles
de la semana pasada que se contaron treinta y
uno del mes de enero habiéndose [dicho] en este dicho pueblo que
Luis Alangan indio natural de el se estaba muriendo
por tener atravesado en el gaznate un pescado llamado
Poyo fue este testigo como a las dos de la tarda a la [casa]
del dicho Luis Alangan al cual vido este testigo que
estaba ahogando y no podía hablar, echando [sangre]
por la boca. Y preguntando este testigo a algunas personas [que]
estaban con el susodicho de que modo se le había [entr]
en el gaznate el dicho pescado le respondieron [que]
[do] pescando el dicho Luis Alangan en Cariotan [h]
cogidolo y revuelto en [chichinina] y [teniéndolo]
dentro de su boca para trónchale la [cabeza]
matarlo en el [mismo] instante el dicho pescado
[ piendo] la dicha [chinina] se le había colado y [en ]
por la boca [hasta] el gaznate donde se le había [q]
atravesado y que por no hallarle ningún [rem]
habían acudido a llamar al dicho padre vicario el [cuál]
lo confesó por señas porque de ninguna manera []
hablar y le había puesto en la garganta el dicho [p]
panesito de San Nicolás el cual [vido] [este]
puesto que le tenía en el dicho lugar el dicho [Luis]
Alangan y queriéndole este testigo echar hacía de [n]
el dicho pescado con una candela metiendo []
por el dicho gaznate no consintió el dicho Luis Alangan
que le metiesen la dicha candela por el []
dolor con que estaba y hallándose [presentó]

Don Carlos Maini principal e intérprete de este dicho pueblo le
dijo que se encomendase a San Nicolás y tuviese confianza
que le había de librar de semejante [trance] y al
dicho Luis Alangan se hincó de rodillas y poniendo
las manos juntas y alzando los ojos al cielo se
levantó luego al punto y metiendo los dedos
él mismo en su boca sacó el dicho pescado a dos
veces que lo hizo habiendo la primera vez [habido le]
por la cola y a la segunda lo acabó de sacar
con lo cual todos los presentes alabaron al señor por
la misericordia que había usado con el dicho Luis Alangan
y lo atribuyeron a milagro juntamente [con]
este testigo que por tal lo tiene. Y que el bienaventurado
San Nicolás de Tolentino a quien el susodicho se
encomendó le valió y ayudó y que este testigo ha oído
decir a muchos naturales haberse muerto
dos personas por ocasión del dicho pescado y haber se le
atravesado en los gaznates como le sucedió
al dicho Luis Alangan y que el pescado que vido este
testigo sacó de su gaznate tendría a su parecer
cuatro dedos de largo y tres de ancho
poco más o menos. Y que era escamoso y tenía
muchas espinas por el lomo como las
tienen los demás pescados de esta calidad y que esto es
lo que sabe y la verdad para el juramento que tiene fecho en que se afirmó y
ratificó no supo su edad pareció por su aspecto de treinta
y seis años y que no le tocan las generales. Y lo firmó de su nombre en letra
Castellana por ser ladino con el dicho padre juez y vicario = va testado
= puesto no vala.
Fray Antonio de Porras Agustín Paran
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Declaración de Luis Alangan}
En el pueblo de Panay en doce días del mes de febrero
de mil y seiscientos y veinte y cuatro años el dicho Padre
Fray Antonio de Porras juez y vicario de este dicho pueblo
para la dicha averiguación hizo parecer ante sí a Luis Alangan
indio natural de este pueblo de Panay para le tomar
su declaración del cual mediante Don Carlos Mayrug intérprete
fue recibido juramento y lo hizo por Dios nuestro señor y una
señal de la cruz en forma de derecho y declarando el susodicho
por el tenor del auto que está por cabeza de esta información:
Dijo que lo que pasa en el caso es que un
día miércoles como a las diez de la mañana estando este declarante
[rozando] y haciendo su [cayngin] para a su tiempo
sembraros en términos de Cariotan y juntamente
con él un hijo suyo llamado Juan y Buyayao su esclavo en
[trasvosados] muchachos acertaron a descubrir y topar con
una laguna pequeña en el mismo lugar donde estaban
haciendo el dicho [cayngin] y entraron todos tres en ella para
efecto de pescar y este declarante apercibió a los dichos
muchachos que si cogiesen algunos pescados llamados
Poyo no los metiesen en la boca para les tronchar las cabezas
y matarlos como se suele haber entre los naturales
a causa de que no les sucediese alguna desgracia entrándoles
en el gaznate y morir de ello según que otras veces
había sucedido a algunas personas. Y habiendo dado este consejo
acertó este declarante acoger uno de los dichos pescados
al cual revolviéndolo en su [chininas] que llevaba puesto
para intentarlo matar y troncharle la cabeza con sus
dientes en el mismo instante antes que llega el [con]
a su boca rompió el dicho pescado por la parte y lugar
donde estaba en la dicha [chinina] y saltando de improviso
dentro de la boca de este declarante se le entró en el gaznate
quedando atravesado y tan atorado en él que no le fue
posibles poderlo despedir de allí aunque hizo mucha
fuerza para tragarlo y viéndose tan atribulado y [que]
el dicho pescado le ahogaba mandó al dicho Juan su hijo y al
dicho Buyayao su esclavo lo [trajesen] a este dicho pueblo

haciendo esto por señas este declarante porque de
ninguna manera podía hablar y habiéndole traído en
un baroto se desembarcó y fue por sus mismos pies a la
casa de Cat.a Uaysolot su cuñada adonde acudieron muchos
indios a ver lo y en particular Miguel Tigou sangley
cristiano cirujano el cual procuró echar el dicho pescado por
el gaznate a dentro y para ello le metió en él un trozo de
corazón de [plátano] y después otro trozo de caña dulce
hasta topar con el dicho pescado haciendo por [ello] despedir
del dicho lugar. Y no le fue posible según estaba tan arraigado.
Ni tampoco bastó [Marcos Hernández] tonelero
aunque le metió los dedos dentro del gaznate y asió por
la cola al dicho pescado para echarlo fuera y así viendo
[que no] tenía remedio alguno fueron a llamar al dicho
padre juez y vicario. El cual habiendo ido a la dicha
casa confesó a este declarante por señas porque
como dicho testigo no podía hablar y le ató un panesito
de San Nicolás a la garganta el dicho padre diciéndole
[que no] pues se moría si encomendase a él para que le valiese
el bienaventurado San Nicolás de Tolentino
y así lo hizo este declarante con todo corazón y que después
de lo cual se fue por su pie a su casa adonde así mismo fue
el dicho Manuel Tigou cirujano. Y le dio a beber un bebedizo
por último remedio que de ningún modo lo pudo tragar
ni pasar al estómago por el dicho impedimento
y lo volvió a echar de la boca sin causarle efecto ninguno
teniendo antes y después [que no] le diesen el dicho
bebedizo. Algunas bascas para vomitar y trocar y llegados
a ejecución no pudo echar ninguna cosa del estómago
por la razón dicha y lo que trocó fue solamente
cantidad de sangre por la fuerza que hacía al tiempo
de los dichos vómitos. Y después de esto al cabo de rato
sintió este declarante salir el dicho pescado del dicho
lugar y llegarse tanto cuanto a la boca y cobrando
ánimo metió dos dedos de su mano y al cansando
al dicho pescado por el vientre le arrancó las tripas
y sacó fuera y metiendo otra vez los dedos y asiendo

bien al dicho pescado lo arrancó de todo punto y sacó fuera
entero como estaba. Lo cual pasó el mismo día miércoles
como a las dos de la tarde poco más o menos de que quedaron
admirados todos los presentes y este declarante más por
la poca esperanza que ya tenía de su vida. Y así tiene por
cosa muy cierta y no pone duda ninguna sino que el bienaventurado
San Nicolás de Tolentino a quien muy de veras se encomendó
le libró de aquel trabajo. Y que esto es lo que pasa
en el dicho caso y no otra cosa. Y dijo ser la verdad para el juramento
que tiene fecho en que se afirmó y ratificó.
No supo decir su edad. Pareció por su aspecto de treinta y
cinco años y que no firmó por no saber. Firmó lo el dicho padre
juez y vicario con el intérprete.
Fray Antonio de Porras
[Lo Ma Yi Da]
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público

{Al margen izquierdo: Certificación del Padre Fray Antonio de Porras juez provisor y vicario}
El Padre Fray Antonio de Porras de la Orden de Nuestro Padre
San Agustín comisario del santo oficio y prior del convento
de este pueblo de Panay juez provisor y vicario de este
dicho pueblo y su río de él, certificó a los que el presente vieren
como un miércoles que se contaron treinta y uno del mes de enero
próximo pasado de este presente año como a hora de medio
día poco más o menos fui por llamado de algunos naturales
a la casa de Cat.a Uaysolot en este pueblo dicho de Panay a confesar
a Luis Alangan indio natural de él que se estaba ahogando
a causa de que decían tenía atravesado en el gaznate un pescado
llamado Poyo. Al cual confesé por señas porque de ningún
modo podía hablar. Y viendo que ya no bastaban humanas
diligencias ni remedios le até y puse a la garganta
del dicho Luis Alangan un panesito de San Nicolás de Tolentino
y le dije se encomendase muy de veras a este bienaventurado
santo y pidiese le ayudase en aquel trabajo ofreciéndole
algunas misas. Lo cual hecho al cabo de dos oras que le puse
el dicho panesito, me dijeron haber el dicho Luis Alangan sacado
el dicho pescado con sus mismos dedos del gaznate donde
lo tenía atravesado el cual dicho pescado. Me fue entregado
y [vide] que era escamoso y tenía muchas espinas por el
cerro y espinoso como las [tienen] los demás pescados de esta calidad
y tendría de largo cinco dedos y de ancho más dedos y todas
las personas que han sabido y visto el caso lo han atribuido a milagro
por parecerles que [si no era usando] Dios nuestro señor de este favor divino
con el dicho Luis Alangan no podía dejar de morir. Y para
que conste de ello di la presente firmada de mi nombre y refrendada
del presente notario que es fecha en Panay en diez y nueve
días del mes de febrero de mil y seiscientos y veinte y cuatro
años.
Fray Antonio de Porras
Ante mí
[Juan Bautista R.es]
notario público